Activistas ecosociales y feministas procedentes del espacio de reflexión y debate Euskal Gune Ekosozialista/Espacio Ecosocialista Vasco (EGE) han unido fuerzas para afrontar la “crisis civilizatoria” desde Euskal Herria. La iniciativa ha sido respaldada por un centenar de agentes sociales y tiene como objetivo desarrollar acciones hasta 2030 para garantizar a todas las personas una vida digna y en armonía con los ecosistemas. El colectivo celebrará una reunión mañana en Durango (Bizkaia).
Se denomina “crisis civilizatoria” a la multiplicidad de crisis superpuestas (económica, energética, ambiental, social…) que afronta la humanidad actualmente. Las posibles soluciones, globales y locales, están planteándose desde los desarrollos teóricos del Decrecimiento, la Transición, el Buen Vivir, el Ecofeminismo o la Vía de la Simplicidad. Todas estas corrientes de pensamiento buscan un modelo de sociedad que garantice una vida digna a todas las personas, compatible con los ecosistemas.
Las iniciativas prácticas que se han apuntado hasta el momento se centran en el consumo, el empoderamiento económico, la soberanía alimentaria y tecnológica, la autorganización política y la movilidad sostenible. También en la simplicidad voluntaria, el ocio creativo frente al trabajo obsesivo, el triunfo de la vida social frente a la lógica de la propiedad y del consumo ilimitado, la reducción de las infraestructuras productivas, de las organizaciones administrativas y de los sistemas de transporte. Se busca también la primacia de lo local sobre lo global y la redistribución de los recursos.
Conocimiento llevado a la práctica
En un comunicado, Euskal Gune Ekosozialista aclara que “no pretende crear otra estructura con vocación autorreferencial”, sino “incorporar en nuestra cotidianeidad las ideas y, sobre todo, las prácticas ecosocialistas y ecofeministas”, así como establecer “una colaboración estable mediante la cual podamos ampliar tanto nuestro conocimiento individual como la inteligencia colectiva de los entornos y grupos en los que participamos”.
La convocatoria responde, según argumentan, a “la gravedad y la urgencia de la crisis ecosocial y civilizatoria global también en el marco de Euskal Herria” y a que consideran que “la respuesta, tanto desde el sistema hegemónico internacional, como desde las instituciones que gobiernan el Estado y las instituciones de Euskal Herria dista mucho de ser la adecuada”.
Creen también que, ante esta situación de emergencia planetaria y, “a pesar de los avances, las propuestas desde los movimientos ecosociales siguen siendo, en muchos casos, parciales y poco coordinadas, con recorridos paralelos, sin apenas intersecciones o incluso caminando en sentido opuesto”. En este sentido, aprecian una “compartimentación y desconocimiento mutuo” de reflexiones y acciones entre los cuatro movimientos básicos (colores) que a juicio de EGE debieran conformar el ecosocialismo: “El verde, ligado básicamente al ecologismo; el violeta, ligado básicamente al feminismo; el rojo, ligado básicamente al sindicalismo y, en general, a los movimientos que luchan por la justicia social; el negro, ligado básicamente al soberanismo y a la autogestión, esto es, al empoderamiento ciudadano”.
Propuestas de escenarios de futuro
El trabajo de ese espacio de reflexión y debate tendrá como objetivo elaborar un documento, denominado provisionalmente ‘Escenarios ecosocialistas y ecofeministas para 2030’, que “ofrezca propuestas de escenarios de futuro y de acciones que respondan a la gravedad y la urgencia de la crisis ecosocial y civilizatoria en el marco de Euskal Herria”.
Se quiere trabajar con agentes sociales de los cuatro colores en espacios “abiertos, participativos, colaborativos, de co-responsabilidad y democráticos”. En cuanto al formato de las reuniones, se combinarán foros de participación, talleres, encuentros bilaterales o multilaterales con una vía de participación en línea a través de blogs y de correos electrónicos como los del EGE. También se publicarán artículos en blogs y medios de comunicación para dar a conocer la iniciativa.