“Ser mujer y ser mayor son factores de alto riesgo” a la hora de sufrir violencia contra las mujeres. De hecho, éste es uno de los tipos de violencia más oculta. Es la advertencia que ha lanzado el colectivo de pensionistas Oneka con motivo del Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres.
En las circunstancias actuales de crisis sanitaria hay, además, hay un factor que se añade: “El tener que vivir en esta situación de pandemia, con los confinamientos, restricciones de relaciones, etc. el riesgo de sufrir distintos tipos de violencia”, añadida “la propia violencia del Covid-19.
“Sumisión y silencio”
A juicio de las mayores pensionistas, la situación hace “mas imprescindible que nunca nuestra unidad a la hora de denunciar esta doble situación de violencia y el seguir organizadas e intensificar nuestra lucha en defensa de nuestros derechos”.
Ello requiere,”superar nuestra situación de especial vulnerabilidad a la hora de denunciar todo tipo de violencia, ya que la falta de seguridad en nosotras mismas y la vergüenza a la hora de dicha denuncia, nos sumerge en la sumisión y el silencio”.
La asociación de mayores se compromete, no sólo en estas fechas, sino “el resto de los días del año” a no dejar impune “ningún tipo de agresión hacia las mujeres, en general, y especialmente al colectivo que formamos las mujeres mayores”, así como a “seguir luchando por la superación de cualquier situación de sumisión en cada una de nosotras”.
