Supervivientes en acción, un grupo de mujeres que ha salido de la prostitución y que exige reparación por parte del Estado y de la sociedad, ha organizado para mañana en Madrid dos actos: el registro del manifiesto con sus demandas en el Congreso de los Diputados, a las 11 horas, y una batukada frente al Ministerio de Sanidad, a las 19 horas.
Las caras visibles de esta agrupación de activistas feministas y formadoras son la vizcaína Sarah Berlori, Vanessa Silva, Carol L y Sonia Sánchez. Además, participan otras mujeres que prefieren permanecer en el anonimato.
Todas ellas han convocado a las asociaciones feministas a apoyarlas mañana en sus ciudades con concentraciones por la tarde. En Euskal Herria han respondido al llamamiento Euskal Herriko Feminista Abolizionisen Koordinakundea (EHFAK) y sus asociaciones. Habrá concentraciones en Gasteiz, Iruña y Bilbao.
Estas son las citas:
- Bilbao: Delegación Territorial de Salud (Alam. De Rekalde, 39), 19 h.
- Gasteiz: Delegación Territorial de Salud (Olagibel, 38), 19 h.
- Iruña: Delegación del Gobierno (pza. Merindades), 19 h.
Otras ciudades como Valencia y Alicante acogerán también protestas a la misma hora y, según las promotoras, en varios lugares se está pendiente de recibir los permisos.
Las supervivientes y quienes las apoyan rechazan rotundamente que la prostitución pueda ser un trabajo y la consideran violencia contra las mujeres. En un manifiesto que han hecho público y que invitan a firmar, Supervivientes en Acción considera que en esta forma extrema de violencia convergen la violencia de género, la violencia económica y la violencia sexual. Unas mil personas y 120 asociaciones lo han suscrito ya.
Como víctimas de la violencia que son saben de primera mano que es difícil salir de la prostitución y se enfrentan a tremendas dificultades para evitar volver debido a la situación de precariedad en la que se encuentran.
“Que niñas y mujeres de hoy en situación precaria no sean prostituidas por varones mañana”
Por ello, exigen a la sociedad, a la que consideran cómplice por omisión, medidas concretas para mantenerlas a ellas y a las niñas a salvo. En concreto, “para que niñas y mujeres de hoy en situación precaria no sean prostituidas por varones mañana”, a fin de conseguir una sociedad más justa e igualitaria.
Las supervivientes dicen alegrarse por “el rumbo esperanzador” de ciertos compromisos partidistas con respecto al abolicionismo de la prostitución, pero creen que las medidas que se están barajando se quedan cortas.
Sus demandas:
- Reconocimiento de la prostitución como una de las más extremas violencias sexuales, psicológicas y de género que se ejercen hacia las mujeres, jóvenes y niñas.
- Aprobación de la LOASP (Ley Orgánica para la Abolición del Sistema Prostitucional) presentada de manera pública por la PAP el 18 noviembre 2020.
- Asistencia y orientación jurídicas, atención social y atención sanitaria y psicológica (todas ellas especializadas y gratuitas). Programa de protección de testigos realmente funcional y adecuado para las mujeres víctimas de trata.
- Prohibición de toda publicidad, tanto de la demanda, como de la oferta de mujeres en cualquier medio público o privado.
- Espacios específicos de resiliencia, restauración y autoconocimiento para las afectadas.
- Especial atención y cuidados para las mujeres en situación de riesgo de exclusión social y precariedad, al ser la pobreza de la mujer el escenario donde el sistema prostitucional se nutre para abastecer la constante demanda de los puteros:
-Ayudas integrales para los y las menores (guarderías, extraescolares, etc.) de familias monomarentales y mujeres con mayores o enfermos a cargo.
-Prioridad en las listas de vivienda de protección oficial, adaptándose a los ingresos, incluso si estos ingresos son 0.
-Renta de garantía de ingresos. - Facilidad para acceder al sistema educativo con estudios subvencionados 100%, becas y recursos para la formación académica de grado superior, universitario, de formación profesional o cualquier otro al que las mujeres supervivientes/víctimas de prostitución consideren cursar para mejorar su CV o capacidades profesionales o personales:
-Prioridad y subvención de todos los cursos de formación feminista.
-Orientación especializada para cualquier tipo de oposiciones para funcionaria del Estado.
-Talleres de expresión corporal, (baile, yoga, etc.), pintura, cocina, etc.
-Convalidaciones gratuitas de estudios para mujeres migradas.
-Ayudas integrales para los y las menores (guarderías, extraescolares, etc.) de familias monomarentales y mujeres con mayores o enfermos a cargo. - Responsabilidad jurídica y consecuencias económicas para los consumidores de prostitución (puteros).
- Retirada de cualquier material didáctico y pedagógico del ámbito educativo en el que se haga referencia a la prostitución como trabajo sexual o asistencia sexual.
- Que se tipifique como grave atentado contra la salud de las mujeres, adolescentes y niñas cualquier blanqueamiento de la prostitución o discursos que promuevan y/o sugieran la prostitución como ejercicio laboral o económico para la subsistencia o empoderamiento personal.
- Programas de formación específica para el trato adecuado de esta problemática social, pero que sobre todo afecta a mujeres y niñas.
- Mayor presupuesto y subvención desde el Estado para combatir y sensibilizar a la población sobre esta problemática.
- Denegación de subvenciones a cualquier entidad pública, social o privada que promueva o blanquee la prostitución, ya que entendemos este tipo de posicionamiento como parte activa del problema y captación.
- Tipificación del discurso regulacionista como discurso de captación velada, puesto que sus ejes son los mismos que los captadores de las redes utilizan: que la prostitución es inocua y que resuelve las situaciones de precariedad.
- Todas las medidas adoptadas y subvencionadas, tanto por el Estado como por las diferentes entidades sociales, vinculadas a las mujeres supervivientes o en situación de prostitución o trata, han de contar con una superviviente-experta en la materia.
- Que los organismos competentes, junto con las figuras expertas en materia, elaboren un plan para crear “estancias de descompresión”, esto es: lugares seguros donde las mujeres en situación de prostitución serán llevadas en las actuaciones de redadas policiales, en lugar de a comisaría. Son lugares neutros donde rebajar los niveles de estrés y miedo, acompañadas de personal cualificado, lejos de presiones, donde se atiendan sus necesidades inmediatas y donde sean informadas de todas sus posibilidades, tanto si desean denunciar, como si no.
- Expropiación de todos los bienes y patrimonio de proxenetas y todas aquellas personas que ejerzan la tercería locativa (alquilar locales para la prostitución), y que dichos patrimonios sean empleados exclusivamente en la restauración integral de las mujeres víctimas del sistema prostitucional.
- Permisos de residencia propio, retorno asistido a sus países de origen para las mujeres que han abandonado la prostitución si lo solicitan y servicios de traducción.