Kote Cabezudo era un fotógrafo reconocido en Donostia y muy bien relacionado. Aseguraba tener influencia en el mundo de la moda y prometía a las jóvenes que posaran para él una carrera fulgurante como modelos, pero a lo que presuntamente se dedicaba era a agredirlas sexualmente –algunas eran adolescentes-, a documentar los abusos y violaciones, y a destinar el material a webs pornográficas.
Calificado por alguien como el ‘Epstein de Donostia’, este presunto depredador sexual será procesado a partir del próximo lunes, día 7, en la Audiencia Provincial de Gipuzkoa. Desde hace cuatro años, permanece en prisión provisional por asuntos desgajados de la causa principal.
La Fiscalía de Gipuzkoa reclama para él penas que suman 121 años y medio de cárcel por 32 delitos sexuales, pornografía infantil, estafa y contra la identidad moral de 16 mujeres y niñas. Ha habido más víctimas, pero en algunos casos los delitos han prescrito.
Por su parte, la acusación particular pide un total de 2.388 años de prisión y destaca entre sus numerosos delitos 152 de abuso sexual con penetración.
Varias denunciantes se han unido formalmente en la plataforma Indarka, que ha hecho público un comunicado
Caso accidentado
La apertura del sumario se produjo en 2013, después de que una modelo se pusiera en contacto con el abogado Mario Díez, quien interpuso la primera querella contra Cabezudo por estafa, injurias y revelación de secretos. En el camino, fueron apareciendo más víctimas.
El proceso no avanzaba y la magistrada instructora fue apartada del caso. Los 31 tomos del sumario elaborado por el nuevo juez reúnen testimonios escalofriantes de las víctimas. Gracias a su supervisión y a la tenacidad del abogado, se ha retirado de Internet el 90% del material aportado a las webs pornográficas.
Ante la inminencia del juicio, varias denunciantes decidieron unirse formalmente el pasado 12 de diciembre en la plataforma Indarka. Son 21 mujeres, 17 de ellas representadas por Mario Díez en este proceso.
En la causa principal se van a juzgar actuaciones del fotógrafo de 1992 a 2013, si bien su actividad se remonta a años antes. «Podríamos ser muchísimas más, ya que hay decenas que no pudieron denunciar porque no se vieron con las fuerzas suficientes para ello o porque simplemente los delitos ya habían prescrito», destacaban.
Relaciones con Odón Elorza
Indarka ha hecho público en las últimas horas un comunicado, en el que acusa al diputado y entonces alcalde, Odón Elorza, de confraternizar con Cabezudo e ignorarlas a ellas, al tiempo que ofrecen su apoyo “incondicional y absoluto” a su letrado, a quien el político socialista ha demandado por declaraciones que, entiende, son lesivas para su honor. El juicio por este caso se celebrará el próximo jueves en el Juzgado de Primera Instancia nº 2 de San Sebastián.
Ofrecemos la nota en su integridad:
Mientras Odón Elorza fue alcalde de San Sebastián entre los años 1991 y 2011, su fotógrafo y amigo Kote Cabezudo estaba cometiendo los cientos de delitos que serán juzgados a partir del día 7 de marzo.
Mientras Odón Elorza estaba en algún lugar de La Concha pronunciando un mitin, Kote Cabezudo le hacía fotos. Ese día tendría que haber comparecido en el Juzgado de Instrucción nº 4 (sí, el de Ana Isabel Pérez Asenjo*), pero le dijo a la jueza que iba a estar un mes hospitalizado y ella no se preocupó de comprobarlo.
Mientras Odón Elorza figuraba como ‘alcalde peculiar’ en la página web de Kote Cabezudo, muchas de nosotras aparecíamos también en ese misma página pero con otra finalidad muy distinta.
En los casi nueve años de instrucción no hemos oído ni una sola palabra de apoyo, no se ha interesado por nosotras ni lo más mínimo. Desde su condición de aforado el ex-alcalde ha presentado una demanda por derecho a ‘su honor’ contra nuestro letrado Mario Díez.
Al diputado le preocupa más su propia dignidad, esa a la que pone un precio de 300.000 euros, que la dignidad de las decenas de niñas abusadas por su amigo. Vaya para él todo el desprecio por su burdo intento de manipulación por enfrentar a nuestro letrado con la sociedad vasca aludiendo a una implicación de corte político que nada tiene que ver con las violaciones y abusos sexuales.
Indarka quiere manifestar su apoyo incondicional y absoluto a Mario Díez. Gracias a nuestro letrado por fin se hará justicia. Agradecerle asimismo su entrega, su tiempo y su entera dedicación a nosotras. No tenemos palabras para describir la enorme ayuda que nos ha brindado.
*Pérez Asenjo es la jueza de instrucción que fue apartada del caso