“¡No somos excepción, somos disidencia!” El clamor retumbó ayer por la tarde en la bilbaína plaza Portal de Zamudio, en el transcurso de la concentración de apoyo a la periodista Irantzu Varela tras la agresión lesbófoba que sufrió el pasado domingo por parte del vecino de su rellano.
La acción había sido convocada por el colectivo de mujeres feministas del Casco Viejo Kalamiak y reunió a varias decenas de personas en torno a una pancarta, en la que se podía leer ‘Eraso lesbofoboen aurrean, autodefentsa feminista’ y ‘Alde Zahar feministan zuen indarkeria ez dauka lekurik’. La convocatoria había recibido el respaldo de otras organizaciones.
“Este sistema nos tiene normativizadas”
Las portavoces del colectivo condenaron la agresión sin citar a Varela y recordaron que “no es la primera vez” que es atacada. Reivindicaron la autodefensa feminista para la toma de conciencia y como herramienta que “nos convierta en sujetos activos, tanto a nivel individual como colectivo” para responder a las agresiones machistas.
Mensajes de apoyo en redes
Además, criticaron a “este sistema y sus aliados”, porque “nos tienen normativizadas cumpliendo la cisheteronorna necesaria para la reproducción de este modelo” y advirtieron de que “no vamos a aceptar las normas de género y las sexualidades impuestas”. Al grito de “¡No somos la excepción sino la disidencia!”, expresaron su convencimiento de que “vamos a poder con este sistema capitalista cisheteropatriarcal que nos ahoga”.
El acto de ayer fue la respuesta habitual del movimiento feminista a las agresiones machistas. La popular periodista viene recibiendo desde el domingo en redes sociales centenares de mensajes de apoyo y afecto, tanto del movimiento feminista de Euskal Herria, como de partidos políticos y sus representantes en todo el Estado, sindicatos, instituciones y personas de los ámbitos de la cultura y de la comunicación.
