Los cuerpos y la sexualidad no normativas han centrado esta mañana el debate de las Jornadas Feministas de Euskal Herria, que se celebran en Durango desde ayer. Han participado representantes de los colectivos Medeak, Elkartean, OZEN, Sare Lesbianista y BALA. Kattalin Miner, del colectivo Medeak, ha hecho una valoración del recorrido de la representación de cuerpos y diversidad en el movimiento desde las últimas jornadas feministas hace 11 años: “Hemos avanzado en nombrar realidades, pero mirando quiénes nos hemos juntado hoy, ¿ha cambiado tanto la foto desde hace 11 años?”.
Desde B.A.L.A han reivindicado el sujeto político ‘bollera’. Lierni Balantzategi ha señalado que “bollera es una actitud, un sujeto de lucha, y al final, una estrategia política”. Además, han subrayado la necesidad del colectivo como espacio organizativo y también de mutuo cuidado.
Las compañeras de Elkartean han trasladado la realidad para muchas desconocida que viven las mujeres con diversidad funcional. Esta alianza con el movimiento feminista viene del trabajo en común realizado en la Marcha Mundial de las Mujeres. Han manifestado reivindicaciones sobre varios temas y derechos como la salud, la ginecología, accesibilidad y el derecho a decidir sobre sí mismas.
“Queremos tener una sexualidad saludable, queremos ser libres, no queremos depender de alguien noche y día. Queremos amor y cuidados, pero no esclavitud”, han declarado. Por otro lado, han hecho énfasis en algunas de la agresiones que sufren las mujeres con diversidad funcional como las esterilizaciones forzosas.
Mujeres racializadas y migrantes
Las organizadoras también han querido recordar que han pasado más de 24 horas desde que dieron inicio a las V Jornadas Feministas de Euskal Herria. En este sentido han valorado de “éxito total” la convocatoria y dicen que “ya el mero hecho de llevar a cabo un evento de tal magnitud, es motivo de felicitación”.
Durante las mesas centrales de ayer el recinto Landako estaba casi lleno y muchas de las asistentes se quedaron sin poder entrar a los talleres y debates. En las declaraciones de esta mañana, Josebe Iturrioz, activista del Movimiento Feminista de Euskal Herria, ha explicado que unos de los objetivos de las Jornadas era activar a las mujeres feministas que no estaban organizadas y “haber reunido a más de 3.000 mujeres es señal de que se está consiguiendo”.
La mesa sobre la decolonialidad, que es uno de los ejes principales de las jornadas por primera vez, dio voz ayer por la tarde a las mujeres racializadas y migradas. “Fue un debate muy encendido que deja clara la urgencia de seguir tratando este tema”, destacan las organizadoras.
Apoyo a las mujeres kurdas
La jornada también ha permitido conocer la dramática realidad del pueblo kurdo, de ahí que se haya querido enviar un mensaje solidario a su lucha y, en concreto, a las mujeres de Rojava.
En este mismo contexto, por la mañana se ha proyectado el documental ‘Iraultzaren haziak’ y, para las 18.30, se ha programado un debate en directo desde Rojava.
