«Normalizar la prostitución obliga a las víctimas a sobrevivir aceptando la violencia»

Carteles exhibidos en Iruñea. FOTO: EHFAK

La coordinadora abolicionista vasca convocó concentraciones el pasado sábado 23S, Día Internacional contra la explotación sexual y la trata de mujeres, niñas y niños. En todas ellas se leyó el siguiente comunicado:

La Coordinadora Feminista Abolicionista de Euskal Herria (Euskal Herriko Feminista Abolizionisten Koordinakundea EHFAK) hace este 23 de septiembre una reflexión sobre la explotación sexual y la prostitución y quiere poner el foco en el consentimiento, ya que estas formas de violencia no pueden ser validadas por este.

Su normalización obliga a las víctimas a sobrevivir aceptando la violencia en sus vidas. Consentir, cuando existen relaciones desiguales, significa satisfacer los deseos de los hombres a costa de los derechos de las mujeres.

Así, la Ley Foral de Navarra 14/2015 para actuar contra la violencia hacia las mujeres, define la Prostitución como una grave forma de violencia contra las mujeres con independencia del consentimiento. Contraponer las opiniones de los puteros con la realidad de las mujeres en prostitución y supervivientes de la misma nos ayuda a comprender esa trampa.

Cuando los puteros hablan de que para ellos la prostitución es solo un mero entretenimiento, para las mujeres prostituidas supone violencia sexual extrema.

Cuando ellos comentan que es como elegir en un catálogo, ellas expresan la cosificación que ejercen sobre sus cuerpos.

Los puteros hablan de hacer con las mujeres lo que les apetezca y con ello están expresando que la libertad sexual sólo la viven ellos a costa de la destrucción de la vida de ellas.

Concentración en Gasteiz. FOTO: EHFAK

“Ninguna mujer nace para puta”

Como dice nuestra compañera superviviente Sarah Berlori: “Ellos desean, nosotras consentimos. La
libre elección está del lado de quien somete, nunca de la persona sometida”.

Ante el supuesto derecho a la sexualidad de los hombres con discapacidad, Mari Mar Molpeceres, activista feminista con discapacidad, dice: “El deseo de los hombres no se puede sustentar en el uso y abuso de las mujeres”.

Muchos hombres siguen pensando que todas las mujeres son unas putas, pero nosotras creemos, como la gran Sonia Sánchez, superviviente de trata, que “ninguna mujer nace para puta”.

Solo lograremos alcanzar la igualdad entre mujeres y hombres, cuando eliminemos todas las prácticas de sumisión y violencia contra nosotras.

Como decía Françoise Héritier, “Decir que las mujeres tienen derecho a venderse es ocultar que los hombres tienen derecho a comprarlas”.

Sin puteros no hay prostitución. Sin prostitución no hay trata.

Concentraciones en Donostia y Durango. FOTOS: EHFAK